Una Salamandra en casa

Ahí os dejo un par de fotos de una colega o colego o neutro (joer, como se complica esto), que quería entrar en casa sin pedir permiso. Como casi siempre que tenemos un intento de allanamiento de morada, “Leo” (nuestra  perra), nos advirtió (en canino), de que un  “anfibio urodelo” que viste camisa con los colores del Peñarol de Montevideo intentaba hacer lo que no debía. Ahí donde la veis, esta “Salamandra salamandra”  de la familia de las “Salamandridae” es muy común por nuestros lares y tiene… digamos bastante mala fama entre los paisanos. Sin embargo, el único problema que puede acarrear a los bípedos dominantes (que pretenciosos somos)  es una irritación cabroncilla en zonas como la boca, nariz, ojos, etc. y eso sólo se puede producir si la andamos sobando con las manos y luego no nos  lavamos a conciencia. Para producir esos efectos utiliza un brebaje de color blanquecino  que segrega mediante unas glándulas de su cuerpo y lo hace únicamente cuando se ve amenazada. Si os interesa observarla bien utilizar un palo procurando no lastimarla y no toquéis con las manos ni a ella ni al palo que estuvo en contacto con su piel.

Os dejo un enlace con la Wikipedia por si queréis tener más información sobre los Caudados (Caudata), conocidos como Salamandras.

No me voy de puente

Tenía yo ganas de irme de puente y darme una vuelta por Lugo, una de las ciudades que más me agradan para pasar un par de días, pero no pudo ser… El cajero se negó en redondo a mis pretensiones a pesar de mi insistencia. Le di de comer con la tarjeta de débito, con la de crédito, con la visa y hasta con la del DíA. No hubo manera, introdujera la que introdujera por su metálica boca este me la devolvía al instante tras hacer unos ruidos extraños con sus tripas. Así que, lamentándolo mucho, no me queda otra que aguantar este largo fin de semana en casa, que estas sean todas las desgracias… Dios proveerá.

Para adornar el comentario os dejo un par de fotos de Lugo… y un mensaje de Manuel María grabado en piedra en el que nos invita a vivir siempre.

Traducción:

Sin metafísica poética digo mi mensaje:

vivid.

Sin gritos que lleguen a las entrañas:

vivid. Vivir siempre

Vivir ahora, antes y después.